lunes, 24 de noviembre de 2014

Primera cita en monte Aa

En algún sitio leí alguna vez que estrenar unas zapatillas de trail nuevas era como echarse novia. Pues bien, recién jubiladas mis Lafuma (que gran zapatilla, más de un año de caña por el monte y aún las queda algún viaje) me decidí a hacer caso a Pascual y a muchas de las críticas que había leido por foros y compré las "La Sportiva Ultraraptor" (crítica Trailrunning Review aquí).

Así lucían al estrenarlas
Dos semanas en el armario llevaban ya las pobres gritando "monte, monte" cada vez que abría la puerta y me las ponía para bajar al perro (para que se fueran haciendo al pie, que Quijas es salvaje pero no tanto). Al final llegó su oportunidad, un domingo húmedo y nubloso de los que ha habido pocos en los que llevamos de otoño. Alguna gotuca y promesa de barro. Para estrenarlas decidí hacer una ruta que hago con cierta frecuencia en alguna de sus variantes: Monte Aá-Sierra del Escudo.

Sin madrugar mucho, me planto en Ruente a eso de las 10:30. Nada más pasar el pueblo, a la derecha se cruza un puente que lleva hacia Monte Aá. Dejo el coche justo tras pasar otro puentecito, en una zona donde se suelen acumular troncos y donde está el cartel indicador de la ruta.


Cogemos la pista de la izquierda (por la derecha se baja en los 10000 del Soplao). La pista es ancha, con buen firme y nos va llevando en una suave pendiente hacia monte Aá. A la derecha vamos dejando alguna cabaña y explotaciones ganaderas. Poco antes de 2 km encontramos un cruce, cogemos la de derecha (también hay cartel indicativo). Antes de eso habremos pasado algunos caminos que salen a la derecha (por uno de esos bajaremos), pero no hay duda de cual es el principal.

Después del cruce la pendiente aumenta y, aunque llevadero, cuesta más subir. Ya vamos rodeados de bosque y, aún siendo pista la sensación es de que estás en el bosque. En ese momento, estruendoso sonido de 5 quads que se acercan por la espalda, me pasan (al menos saludan) y en unos minutos dejo de oírlos. Paso por la curva de donde sale la senda a los arboles singulares de Monte Aá (muy recomendable) y allí me encuentro a los paisanos de los quads repostando (cigarrillo, bota de vino, cervecita, ¡viva el monte!). Sigo para arriba a lo mío.

Llegando al km 7, ya en el collado, cogemos un desvío a la derecha, indicado con un cartel que pone "Sierra del Escudo". El camino cambia: tierra (generalmente embarrada, pero está todo seco, aunque haya llovido algo por la noche) y pindio (aquí el cuerpo pide algo de tregua y subo andando un par de rampas duras). Tras un par de zigzag el camino coge nivel por encima del bosque y tras 1,5 km subimos por un camino que sale hacia la izquierda y ya sube hasta la sierra del Escudo. Para mi sorpresa consigo hacerlo corriendo (¡voy cogiendo fondo!). 
Las vistas desde la sierra del Escudo suelen ser espectaculares, pero hoy las nubes tapan casi todo. El viento es frío y llueve un poco. Me pongo el chubasquero, un gelecito, unas fotos y seguimos.

La masa boscosa de Monte Aá
Sierra del Cordel
Peña Sagra
San Vicente de la Barquera
Comillas
 Por el cordal del Escudo seguimos dirección Este (hacia el Oeste ya iremos un poco más avanzada la temporada), el camino es una senda rota, que alterna barro negruzco, turbón, con lastras mojadas, auténticas trampas para los confiados, y pequeñas brañas por las que da gusto correr. Como ya voy sobre aviso, apoyo con cuidado. Hoy no hay mucho barro, pero las piedras están mojadas, aún no conozco bien las "zapas" y, como en toda primera cita, si te propasas tienes muchas probabilidades de llevarte una torta. Las primeras sensaciones son buenas, agarran bien, pero me llevo un par de sustos. En general se puede correr por este tramo del cordal, aunque hay un par de repechos y algún tramo muy roto en los que camino.
El cordal por el que vamos y al fondo Ibio, Acebo, Mozagro y Toral
 Así tras 4 km que, pese a ser divertidos, se hacen un poco largos, llego a cruzarme con el camino que sigue el Soplao y, pasando una alambrada a la derecha, me encamino al cortafuegos que baja de nuevo hacia Ruente: 200 de desnivel en apenas 500 metros, con una rampa descarnada y una tierra recién humedecida que resbala como el demonio. La senda es visible, pero en general se baja mejor por los matojos, que resbalan menos que la tierra.
El cortafuegos desde arriba
El cortafuegos desde abajo
Bajo con mucho cuidado, se me cargan los cuadriceps y, aún así, me llevo un par de sustos. Esta bajada es peligrosa mojada, pero hoy casi que lo estaba más de lo habitual. Buen sitio para probar la adherencia de las ultraraptor, que no me decepcionan.

Una vez abajo, llegamos de nuevo a una pista de tierra llana que seguimos hacia la derecha. Para hacer algún kilómetro de más decido seguirla (en lugar de bajar por donde lo hace el recorrido del Soplao, indicado con postes) y, ya hacia abajo, 3 km por buen firme hasta salir de nuevo a la pista de inicio. Desde ahí todo llano hasta el coche.

En resumen 17 km, +730m, 1500 de acumulado y primera cita superada. Creo que será el inicio de una fructífera relación, pero habrá que esperar a la próxima para entrar en profundidades...

La ruta en Garmin Connect: aquí
Una panorámica en Google Earth y el perfil



3 comentarios:

  1. Te deseo felicidad en esa relación y espero que tu señora no se entere de que le pones los cuernos..., y si tenéis alguna camada, acuérdate de mí jajaja
    Saludos.

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